Quizás porque eres el hombre de mi vida,
que me quiere como soy,
pienso siempre en tí.
La vida, no es vida,
y no tenerte junto a mí,
es como querer morir.
¡No lo entiendo, vida mía!
Si todavía fué ayer, cuándo juntos,
apagamos los deseos de abrazarnos.
Juntos no, entrelazados, nos amamos,
en un tierno y dulce abrazo.
Lo entiendo, aunque no quiera.
Sé que la vida es así.
¡Yo no puedo hacer nada!
Solo decirte te quiero.
¡Cómo te quiero amor mío!
Se lo grito a esa estrella
que es el único testigo
de nuestra vida privada.
Y termino este poema,
que aunque no ritman sus versos,
ritman los sentimientos
que me salen de muy adentro.
Read Full Post »